El Fiscal General de California, Rob Bonta, se reunió con las autoridades locales, líderes empresariales, empresas de servicios públicos y funcionarios estatales y locales para continuar el diálogo sobre la lucha contra el robo de cable de cobre.
Bonta afirmó que California ha experimentado un aumento en el robo de cables de cobre en todo el estado, lo que ha dejado a los vecindarios sin servicio, lo que ha provocado cortes en las telecomunicaciones y los servicios públicos. Esto afecta las operaciones comerciales y agrícolas, poniendo en peligro la seguridad pública.
“Los ladrones que buscan lucrarse con el robo de cable de cobre no solo cometen un delito; con demasiada frecuencia, dañan infraestructura crítica y ponen en peligro a nuestras comunidades”, declaró Bonta. “Si bien el valor del cobre sigue siendo alto, podemos prever que el cable de cobre seguirá siendo blanco de robo y vandalismo, por lo que hoy reunimos a los líderes del norte de California para debatir soluciones colaborativas”.
Cuando las personas cometen robos de cobre y actos vandálicos, se provocan interrupciones en el sistema de emergencia 911 y en las operaciones policiales, cortes de energía, atascos y riesgos de seguridad en el transporte público, autopistas, puentes y aeropuertos, afirmó Bonta.
Desde las fuerzas del orden hasta los gobiernos estatales y locales, la industria de las telecomunicaciones, la comunidad empresarial y más: todos tenemos un papel que desempeñar en la prevención del robo de cobre, la protección de nuestra infraestructura y la protección de los californianos. El Departamento de Justicia está listo para apoyar a las fuerzas del orden locales y colaborar para que los responsables rindan cuentas por sus delitos, declaró Bonta.
Entre junio y diciembre de 2024, solo la industria de las telecomunicaciones reportó más de 6000 incidentes de robo de cobre y vandalismo de infraestructura en todo el país, según Bonta. Las personas roban cables de cobre revestidos y los cortan en trozos cortos antes de quemarlos para retirar el revestimiento y revelar el cobre crudo en su interior.
Más de un tercio de esos robos ocurren en California, dijo Bonta.
El Departamento de Justicia de California afirmó que el cobre luego se vende a comerciantes de chatarra, algunos de los cuales, con el tiempo, están dispuestos a aceptar el valioso producto a propósito sin saber su origen.
“Desde la seguridad pública hasta la atención médica, la energía, el transporte, los sistemas financieros, la tecnología de la información, la educación y más, la vida hoy en día difícilmente podría funcionar sin la infraestructura detrás de los sistemas de comunicaciones”, dijeron los funcionarios en un comunicado de prensa.
El Departamento de Justicia de California dijo que si nota alguna actividad sospechosa, informe a la policía local lo antes posible.
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