Si bien muchos estadounidenses apoyan las duras políticas migratorias de Trump, la incesante presencia de las redadas en la región también ha provocado una feroz reacción de vecinos y activistas. Se estima que en el sur de California viven 1,4 millones de inmigrantes indocumentados, muchos de los cuales se han visto obligados a esconderse por miedo a ir al trabajo, a la escuela o incluso al supermercado.
De esta manera, las redadas han alterado el panorama de una de las regiones más pobladas del país. Los negocios están cerrados y las ciudades han cancelado eventos comunitarios, incluyendo las celebraciones de fuegos artificiales del 4 de julio.
“Todos están pendientes”, dice una vendedora de raspados en Los Ángeles un domingo reciente, donde los campos de fútbol y las mesas de picnic, normalmente llenos, estaban prácticamente desiertos. Mientras preparaba el raspado con dulce jarabe de fresa, parecía recelosa ante las preguntas, pero agradecida por tener una clienta.
“Nunca es así”, dijo.
Las redadas en las dos plantaciones de cannabis ahora se promocionan como la operación de inmigración más grande desde que Trump asumió el cargo.
De los 361 migrantes detenidos durante esas redadas, cuatro tenían antecedentes penales extensos, incluyendo violación, secuestro e intento de abuso sexual infantil, según informaron los medios. Los agentes de inmigración también encontraron a 14 niños migrantes que, según el gobierno, han sido rescatados de una posible explotación, trabajo forzoso y trata de personas.
Aunque la administración destaca con frecuencia a los violadores, asesinos y traficantes de drogas convictos que ha arrestado en operaciones, decenas de inmigrantes, muchos de ellos sin condenas penales que han pasado décadas construyendo negocios, familias y hogares, han quedado en la mira.
“Simplemente te secuestran”, dice Carlos, quien no quiso que se revelara su apellido completo por temor a ser deportado a su natal Guatemala. Ha tenido demasiado miedo de ir a trabajar desde que su hermana, Emma, fue detenida mientras vendía tacos afuera de un Home Depot el mes pasado. “Si soy moreno, si soy hispano, simplemente vienen, te atrapan y te llevan”.
La administración Trump dice que las afirmaciones de que las personas están siendo atacadas debido al color de su piel son “repugnantes” y falsas.
You must be logged in to post a comment Login