Algunos ahorran años para comprar su terrenito y fincar su casita, otros piden su impagable crédito al Infonavit… otros compran un Boeing 737, se lo llevan a la paradisiaca isla de Bali y construyen su paraíso sobre un acantilado.
Por lo menos eso hizo el, obviamente, multimillonario promotor ruso Felix Demin quien compró un jet de pasajeros, y lo transformó en un hotel al que llamó Private Jet Villa by Hanging Gardens.
El emprendedor, colocó la aeronave sobre un acantilado en la isla indonesia, y a su alrededor construyó una alberca y todos los servicios para que la experiencia sea inolvidable…para quien pueda pagarla, pues el precio por noche empieza en 1.600 dólares pero los paquetes pueden llegar hasta los 7 mil dólares.
“Incluso antes de comprarla, pensé que era posible convertirla en algún tipo de objeto único, y decidí concentrarme en crear una villa”, explica Demin.
“Quiero que la gente experimente el ‘efecto sorpresa’ de cada segundo de estancia en este lugar insólito”, añade.
La Private Jet Villa by Hanging Gardens está abierta al público desde 2023, pero en los últimos meses se ha hecho viral en las redes sociales gracias a un vídeo promocional que se muestra su diseño y sus impresionantes vistas al mar.
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