EE.UU. enviará 725 millones de dólares en sistemas antidrones y minas a Ucrania

Washington planea enviar un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania, valorado en 725 millones de dólares, que incluye sistemas antidrones, municiones avanzadas y minas antipersona, en un esfuerzo por fortalecer la capacidad defensiva y ofensiva de Kiev frente a la invasión rusa.

Entre los componentes del paquete se encuentran municiones para los Sistemas de Cohetes de Artillería de Alta Movilidad (HIMARS), una de las herramientas más eficaces en el arsenal ucraniano. Aunque funcionarios estadounidenses no confirmaron si este envío incluirá los codiciados misiles de largo alcance ATACMS, Ucrania ha estado solicitando su suministro con el objetivo de alcanzar posiciones estratégicas dentro del territorio ruso.

Además de las municiones, el paquete contempla el envío de más sistemas antidrones, esenciales para contrarrestar los ataques aéreos rusos, y minas antipersona, que Ucrania busca emplear en áreas clave como la región de Kursk, donde las fuerzas terrestres rusas y norcoreanas han intensificado su actividad.

Los funcionarios estadounidenses, que hablaron bajo condición de anonimato, señalaron que este paquete forma parte del compromiso de Washington de continuar apoyando a Ucrania en su resistencia contra la invasión. Este envío se suma a la ayuda acumulada desde el inicio del conflicto, consolidando a Estados Unidos como el principal aliado militar de Ucrania.

El uso de los sistemas antidrones y las minas antipersona será fundamental para reforzar las líneas defensivas ucranianas y proteger zonas estratégicas del país. A su vez, los HIMARS han demostrado su efectividad en ataques de precisión contra objetivos enemigos, lo que convierte a estas municiones en una pieza clave para mantener la ventaja táctica en el terreno.

El anuncio oficial de este paquete se espera en los próximos días, en medio de las tensiones crecientes por el papel de actores externos, como Corea del Norte, que han incrementado su cooperación militar con Moscú en los últimos meses.

La comunidad internacional sigue de cerca el desarrollo de la guerra, mientras Ucrania insiste en la necesidad de recibir armamento más avanzado para acelerar la reconquista de territorios ocupados. Por su parte, Rusia ha intensificado sus ataques y mantiene su postura desafiante frente a las sanciones económicas y el aislamiento diplomático promovidos por Occidente.

Con este nuevo envío, Estados Unidos reafirma su compromiso con Ucrania y su defensa de los principios de soberanía e integridad territorial, mientras el conflicto entra en una nueva fase marcada por el aumento de las tensiones y la escalada en el uso de tecnología militar avanzada.

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