Nuevos datos de seguimiento revelan que la costosa reparación de la Millennium Tower en San Francisco ha evitado que el edificio siga hundiéndose, pero la inclinación no se está corrigiendo según el ritmo previsto por los ingenieros. A pesar del éxito en evitar un mayor hundimiento, el edificio sigue inclinado y no muestra una mejora significativa en su inclinación.
La recuperación de la inclinación podría haber alcanzado su punto máximo, lo que significa que el rascacielos podría quedar permanentemente inclinado en 29 pulgadas.
A pesar de que la solución ha evitado un mayor deterioro, los ingenieros enfrentan desafíos en su intento de enderezar completamente la torre. La pared subterránea debajo de los cimientos podría estar contribuyendo al problema.
Los funcionarios de la ciudad destacan que cualquier recuperación es positiva, pero la inclinación podría tardar en corregirse gradualmente con el tiempo.
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